Mano de Dios Diego Maradona encontró en esta metáfora, la forma de explicar qué sucedió frente al arquero inglés Shilton, cuando todavía Argentina e Inglaterra empataban 0-0, en el Mundial de 1986. Aquel rápido golpe con su puño izquierdo puso la pelota en el fondo del arco, sorprendiendo a todos, en especial al árbitro Alí Bennaceau, de Túnez.